Se corrigió a tiempo

Fernando Camara

Cuando observamos a la selección nacional y analizamos lo ocurrido en estos últimos dos años, nos damos cuenta que hay un punto de inflexión. Después de tantas pruebas, cambios de esquemas y estilos, además de convocar un gran número de futbolistas, César Farías encontró la forma para conseguir buenos resultados.

El 2010 fue un año donde se probó mucho, el famoso “pase largo efectivo” era el principal argumento ofensivo del combinado nacional y nunca terminó de asentarse dentro del seno del vestuario. El seleccionador al ver que los resultados positivos no llegaban, a través de sus decisiones pudimos ver que hizo una autocrítica (interna por supuesto). El llamado de José Manuel Rey en aquella gira por Jamaica creo que fue el momento donde todo cambió, una metamorfosis sucedió allí y es el punto de inflexión al cual me refiero.

El defensor del CD Lara es uno de los líderes del grupo dentro y fuera de la cancha, es de aquellos futbolistas que todo técnico quiere tener. A partir del amistoso ante España se empezaron a ver mejoras en la forma de jugar, más allá del resultado. Observamos un mejor trato a la esférica y más fútbol asociado, ese fue un abreboca de los que veríamos en la Copa América.

Para la Copa el trabajo físico de Dallas fue primordial, el estado físico de los muchachos fue impresionante, durante los noventa minutos veíamos como corrían con la misma intensidad, eso fue clave. Otro punto importante es el juego colectivo de la Vinotinto, el sacrificio es una de sus principales premisas, todos defienden y todos atacan.

Antes de las eliminatorias a Brasil 2014, varios futbolistas que habían sido convocados un tiempo atrás se unieron a la selección: los hermanos Fletscher, Julio Álvarez, Fernando Amorebieta y Andrés Túñez. Estos se han adaptado rápidamente al grupo y han mostrado el compromiso que sienten cada vez que salen a la cancha. Ahí podemos ver el nivel de compenetración que existe actualmente en la oncena nacional.

El mérito de César Farías es que puso el colectivo por encima de lo individual y se atrevió en su momento a renovar la selección. Hoy Venezuela es tercera con siete puntos en la clasificación del proceso eliminatorio al Mundial del 2014 y vive un momento muy dulce. Hasta junio no veremos a la selección en encuentro oficial y todo un país se paralizará nuevamente para seguir soñando.

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