El fútbol sigue creciendo en Venezuela y en esta ocasión es a través de un equipo del fútbol español, uno de los de mayor tradición y que en su época tuvo en sus filas a uno de los mejores jugadores de Brasil, Denilson. La Academia del Real Betis en Venezuela sigue siendo y haciendo la diferencia y es allí donde se pudo conocer la historia de un grupo de niños venezolanos que viajaron alrededor de 7 mil kilómetros de distancia para poder presenciar un partido en vivo del Betis por primera vez en sus vidas.
Los niños, acompañados por sus señores padres y también por todo el staff técnico de la Academia que hace vida en la ciudad de Caracas, viajaron hasta Sevilla para presenciar el duelo entre el Real Betis contra la Real Sociedad, este último club donde también hace vida el jugador de la Selección Nacional de Venezuela, Jon Aramburu.
Luis Olivo, director de la academia tuvo palabras en exclusiva para el medio El Desmarque en donde explicó la emoción, la alegría y todo lo que los pequeños se vivieron al poder presenciar este partido y vivir la experiencia del viaje a España.
«La afición por el Betis en Caracas es cada día mayor»
«Estamos en un programa que se llama Inside Betis, un programa para que los niños de Venezuela conozcan los valores del club y que conozcan cómo es el trabajo dentro del club aquí en España, más allá de la metodología que implantamos nosotros que es la que nos envían», relató el director de la academia del Betis en Caracas.
«Vinieron 22 niños y 24 padres. Son todos de Venezuela y es la primera vez que están en el Benito Villamarín. Se lo puedes preguntar a ellos pero estoy seguro de que hay mucha alegría, venimos a un partido muy importante. Ser del Betis ha sido una ventaja para unirnos como una familia y le hemos inculcado a los niños los valores del club. En Caracas cada día la afición por el Betis es más grande. Tenemos 150 niños en la academia con proyección de crecer a 400 o 500», comentó Luis Olivo.
Sin lugar a dudas esta experiencia puede ser un argumento sólido y recuerdo de motivación para todos los pequeños de llegar a ser algún día, jugadores profesionales y es además, una clara muestra de que ni siquiera el cielo es límite para ellos, siempre y cuando se lo propongan.
«Seguimos los partidos del Betis permanentemente y seguramente un día tenemos un futbolista de élite sacado de nuestra academia en Caracas».
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