El Caracas Futsal Club sufrió su segunda caída consecutiva en la Copa Libertadores de Futsal a manos del Cerro Porteño paraguayo, volviendo a experimentar la desagradable sensación que la derrota, fue debido a sus propios fallos antes que por méritos del rival.
Antonio Da Silva – Prensa Liga Superior de Futsal
Que los Ayala, Rejala o Salas son tipos de gran recorrido en las lides futsaleras internacionales, estaban avisados todos en la carpa capitalina. Pero los primeros compases del encuentro marcaron diferencias entre quienes vienen de ser campeones en 2016 y sub-campeones de 2017 en esta prueba, y un equipo que ganó la estrella en su país, se desmanteló, trajo refuerzos de varios sitios y un nuevo técnico, además de no competir por puntos desde octubre.
Lo bueno es que la charla de medio tiempo activó las respuestas del conjunto venezolano. Y por suerte la divisa pudo mantener en la plantilla a un jugador del nivel de la “Maravilla” Cabarcas. El goleador de Mene Grande ha sido la figura del Caracas y sus tantos mantienen al equipo aún con esperanzas matemáticas de trascender.
Dos goles del zuliano (el segundo de grana factura técnica) regresaron al Caracas al partido. Ariza asumió el papel de “secuaz” de Cabarcas y Vento mostró chispazos leves que no llegaron a travesuras. Y en ese momento, con la incerteza del resultado y la sensación de que el empate estaba al caer, un experimentado Moreno, ya pintado de amarillo, se barrió al límite pero en la cancha del rival. Segunda amarilla y expulsión. Son esos detalles los que siempre nos bajan del vagón de adelante.
Desde el punto de diez los azulgranas marcaron el cuarto y mataron el partido. Sumaron un gol más y sobre el final, atacando con cinco y por vía del autogol, Caracas acomodó un marcador definitivo de tres goles por cinco.
Los de Romero aún tienen la posibilidad muy real de pasar a cuartos de la Copa Libertadores de Futsal. Para ello deberán derrotar a los peruanos del Panta donde actúan los ex – caraquistas Morillo y Monzón. La misma situación que se vivió en 2017. Aquella vez el Caracas no pasó del empate y le tocó hacer la maleta. Este martes creemos que todo será diferente y el bicampeón de la Superior pasará como tercero.