Fernando Cámara
Foto: AVN
La era de Juan Arango en la Vinotinto llegó a su final. Entre lágrimas, anunció su retiro de la misma al término del amistoso ante Panamá, en el CTE Cachamay, el pasado 8 de septiembre.
Horas antes, el capitán informó que iba a dar una rueda de prensa, donde se realizarían anuncios importantes. Los rumores en las redes sociales comenzaron a rodar rápidamente de que no se pondría más la camiseta de la selección nacional. Cuando ingresó a falta de 20 minutos para el final, unos cuantos aficionados aplaudieron. Cuando finalizó el compromiso, las miradas de todo un país posaban sobre él. Ya se sabía que el adiós era inminente.
Llegó a la sala de prensa acompañado por sus compañeros de equipo y cuerpo técnico. La mayoría tenía cara de desconsolación, como si hubiesen sufrido una pérdida dolorosa. «Es un momento duro para mí. Después de 16 años, tomé la decisión de dejar la selección. Me duele bastante. El ciclo de Juan Arango ha terminado. Le doy las gracias a todos cuerpos técnicos, desde Lino Alonso hasta Chita, utileros, afición, a todos. Creo que ya el momento mío ha pasado. Siempre voy a estar aquí. No tengo más palabras para decir lo que siento», fueron sus primeras palabras. Instantáneamente, el llanto en sus ojos aparecía, su voz quedaba muda y solo se escuchaban aplausos en la sala.
“Creo que hay grandísimos jugadores aquí. Ellos van a hacer lo posible para estar en Rusia. No sé les puede criticar nada porque han trabajado fuerte para cumplir ese sueño. Yo no pude hacerlo y ojalá pueda cumplirse para esta eliminatoria”, soltó cuando fue capaz de hablar nuevamente.
La Copa América de Chile marcó el principio del fin. “Desde entonces ya no sentía las mismas ganas, el mismo esfuerzo, la misma alegría de venir con la selección. La decisión la tomé en estos dos meses después de la Copa América. Lo hablé bastante con Chita. Los dos partidos que estuve en la banca no tuvieron nada que ver. Antes de la Copa ya le asomé a Chita mi decisión. Vine a estos dos amistosos para ver si me daba un poco más de ganas de seguir. Pero, no me da», prosiguió.
Es considerado por muchos el mejor futbolista venezolano de la historia. 130 partidos internacionales con la selección y fue el primer jugador criollo en establecerse en el extranjero. «Cuando salí de Venezuela a México la meta era abrir las puertas al fútbol venezolano. Ayude, el legado está», apuntó. Asimismo, “espero que mi retiro sea en un marco diferente. En otro amistoso».